Sexto día



EL CAIRO - PIRÁMIDES - ESFINGE - PIRÁMIDE ESCALONADA


Hoy es el día de LAS PIRÁMIDES. Madrugamos para evitar la avalancha de turistas, aunque en esta época no es muy importante. Y eso es algo a tener muy en cuenta a la hora de programar este viaje.

Las pirámides te atrapan, te emocionan, te hacen sentirte minúsculo. Las quieres ver, llevártelas en una foto y haces mil. Esos misterios que tantas veces has leído, de su orientación, de sus dimensiones, del número PI,……. Te los crees y los das como ciertos. Porque al intentar entender su construcción, el cómo se construyeron, que también tiene su qué y el cuándo se construyeron, te hacen sentir que estas ante algo SOBRENATURAL (a lo mejor exagero algo)

Se puede entrar al interior de las pirámides. Hay dos opciones, entrar a la pirámide grande de Keops (padre) o a la mediana de Kefrén (hijo) la tercera es la Micerino (nieto), que no tiene entrada para turistas.  La diferencia está en el precio y en las dimensiones de los pasadizos. 

Entramos en la de Keops. Eso supone introducirte por unos pasadizos donde tienes que ir agachado (no recomendable a gente con problemas de espalda ni para ir cargado con una mochila grandota), con una cuesta que requiere su esfuerzo y asumiendo que encima de ti hay millones de toneladas de piedra. Así, hasta llegar a la sala mortuoria donde se depositó al yacente Kefrén. Te sobrecoge el lugar, porque no hay pinturas, ni nada, solo la triste roca. Pero la imaginación te transporta a aquella época y también llegas a pensar “¡que esfuerzo tan brutal para dar sepultura a un hombre!. Pero naturalmente, para los egipcios no era un hombre, era DIOS. Y cuantas Iglesias, mezquitas, ……..no se han construido para venerar al Dios de cada creencia.


Al salir, todos nos lanzamos a hacer la foto más imaginativa para recordar este momento.
 Durante ese tiempo siempre tendrás algún vendedor que te ofrecerá sus productos y algún camellista que te dirá que te hagas una foto o un paseo. Ya sabes regatear o hacerte el loco.




Después fuimos, con el autobús, se puede hacer andando o en calesas, a una mirador desde donde se pueden hacer fotos panorámicas de las tres pirámides. Evidentemente allí toca pelear para encontrar ese hueco que te permite seguir inmortalizando tu visita a ese lugar. Como no había muchos turistas o egipcioturistas (los niños están de vacaciones en esta época) pudimos hacernos fotos de todo tipo.





Y por último, con autobús, fuimos a ver la ESFINGE (con una altura de unos veinte metros y 57 metros de longitud). Otro momento mágico, para el que no tienes que tener prisa. Hay que disfrutarlo y como es lógico, fotografiarlo. La típica es la del beso. Requiere encontrar el sitio y paciencia.





Con una sonrisa de oreja a oreja y con la satisfacción de haber cumplido uno de nuestros sueños (tocar las pirámides de Egipto).

Al regresar al autobús pasamos por lo que podíamos denominar parking, donde se mezclan camellos, calesas y autobuses. Todo un espectáculo.


 Toca ir a comer. Esta vez fue en lo que podemos llamar un merendero, donde nos dieron una comida que nos supo a gloria, por el hambre que llevábamos y que podríamos decir que fue bastante aceptable. El ambiente era tranquilo y el olor de las carnes especiadas a la brasa te hacían sentirte en una zona un poco especial.


Para rematar, por la tarde fuimos a la necrópolis de MEMPHIS donde sólo merece la pena ver la estatua de RAMSES II y la de HAPSETSUT ( una de las dos faraonas de Egipto y cuya tumba habíamos visitado cerca del Valle de los Reyes) y como más interesante, el poder observar cómo es la vida en algunas zonas de Egipto: sus carnicerías, fruterías, talleres, panaderías, etc. Hazte a la idea que la suciedad y la falta de higiene llega a alcanzar unos niveles ...............






De ahí nos fuimos a ver la necrópolis de SAKKARA  presidida por la pirámide escalonada de ZOSER (la más antigua de todas las pirámides), que no tiene acceso a su interior, pero que tienen unas dimensiones que no desmerecen a las anteriores. Hay que reseñar que aquí los bloques de piedra que usaron fueron más pequeños



Al lado de ella está la MASTABA DE TI (un alto funcionario del faraón). Este tipo de tumba fue de los primeros enterramientos importantes, anteriores a las pirámides y por lo tanto más antiguos. Señalo esto, porque los grabados que vimos en su interior, recogiendo escenas de la vida cotidiana, donde aparecen cazadores, pescadores, ….. son de una perfección inimaginable para su época. Esto, contado, con pasión, por el guía nos hizo entender lo increíblemente avanzada que estaba el pueblo egipcio y el alto nivel artístico que tenían. (Al tener pinturas, estaban prohibidas las fotos)




Después tocaba regresar a los hoteles y descansar. Nosotros aún aprovechamos para dar una vuelta por la plaza TAHRIR o de LA LIBERACIÓN donde tuvo lugar la revolución de “LA PRIMAVERA ÁRABE”. Y como en este país es normal… mucha gente por la calle hasta altas horas de la noche.


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